jueves, marzo 16, 2006

Amor Eterno

Amor Eterno


Hoy, al levantar mi vista del teclado, y volver a encontrarte frente a mí, he vuelto a revivir nuestro primer encuentro. Fue tan especial, que jamás se borrará de mi memoria. Acababa de bajar de un tren, cuando al doblar una esquina, inesperadamente, nos encontramos frente a frente. Estabas inmóvil, al final de la calle, parecías brillar con tu propia luz, luego comprendí que solo eran reflejos del sol a contraluz. Parecías desbordar la calle, como si quisieras abalanzarte sobre mi….. y yo latía, de tanto como deseaba que lo hicieras…….. Me aproximé a ti, lentamente, con el corazón batiendo aceleradamente, me inundaste primero con tu aroma, luego te dirigiste a mí como en un dulce murmullo que parecía suspender el mundo a nuestro alrededor, como si solo tú existieras. Luego, después de conocerte, aprendí a caminar a tu lado con los pies descalzos, sentí tus besos, aprendí a paladear tus sabores en mi boca, inundarme de ti, sentir tus caricias invadiendo mi piel en ondas circunflejas, penetrar en tu seno, profundamente, hasta el centro y origen de la vida. Sufrí las añoranzas cuando estábamos lejos el uno del otro, consternado al pensar que pudiéramos olvidarnos durante las ausencias………..

Cuando retorno mi vista hacia el teclado, mientras repito con voz sorda cuanto te amo, no puedo evitar volver a elevar mi vista y contemplarte, una vez más, al fondo del jardín. Ahora veo que un velero surca tus olas brillantes bajo el sol, mientras una suave brisa que penetra por la puerta ventana, me trae tus aromas de sal y viento de levante.
Hoy, sus olas me hacen guiños de complicidad, recordando nuestro amor eterno, el que se inició aquel día en el que, por primera vez, el mar se asomó a mi vida, al final de una calle……. justo después de bajar de un tren.