jueves, diciembre 30, 2004

Dia de Reflexión......

Jornada de reflexión: La que precede o pone fin a las batallas….. y de ambas cosas es esta que convoco, veamos como:

Afilo la tecla y mientas contemplo el estallido de las multicolores pompas de jabón que todavía exhalo al respirar, mis dedos se deslizan con presteza por el primer libro en Braille que descifro.

Y miro hacia atrás, y lo analizo, y le doy tres vueltas al tío vivo, y…… ya está el círculo cuadrado en extraña forma y algo retorcido.

Primo da tutto:

“El Desenlace” Tout est bien qui fini bien”. Eso no implica que no pudiera haber sido mejor…… Pero ya se sabe: Lo mejor es enemigo de lo bueno y de todas formas…. hay que vivir con ello.

"El endenantes":

Ahí si que hay que lavar y limar y raspar y dar la vuelta…….

Mi profe dixit; Antes de sumar o restar facciones –la “r” suprimida por el autor- hallemos siempre el común denominador. Y para eso, convengo sin dolor y sin esfuerzo que NO NOS gusta lo que escrito estaba.

La limpieza de fondos y vaciado de sentinas es algo que, en barcos como el mío y más cuando navegan por mares procelosos, se hace necesidad -que no virtud-. Bien hecha está, por tanto, la limpieza. Ni rastro queda de lo que consumió la pira. El jabón y el olvido harán el resto.

Las discrepancias:

Mal está el abuso de otra lengua para infundir terror al enemigo, sobre todo, si un cálculo mal hecho amenaza con un riesgo eventual, aunque sea falso, a un bien que nunca debió ser puesto en peligro. Mi añagaza -en lenguaje mágico, técnicamente se llama “miss direction”- surtió efecto, pero rompió los platos con la sopa dentro. Dicho está, dicho queda y que se esculpa en piedra berroqueña.

Iluso parece, por el contrario, el invocar retiradas estratégicas, por mucho que el invierno apriete, para esconder razonables desbandadas. Pero a esto digo: si al enemigo que huye… puente de plata. Al amigo que se va, poco importan las razones, brazos tendidos -y esta vez hacia adelante, no a la espalda-. A la vista está que se aceptaron. Lo demás poco importa, el barco se ha salvado.

Ni me dejo domar ni a domador aspiro. Normalmente mi música se esfuerza en seguir la pauta, ya sabes: tono, dominante, subdminante, y otras florituras: séptimas, disminuidos ….. , etc.: La clave de Sol es mi favorita por el relumbrar y la libertad que inspira.

Ni acepto cuadra, ni soga en picadero me hace girar alrededor de un fatuo. Respondo al cariño, a la palmada en el hombro, al abrazo, a la sonrisa, al ojo tierno, a la lágrima que asoma antes de evaporarse, al saber mirar sin decir nada, al aroma del afecto, al …… ¡pon tu el resto!

Si a esto le llamas domar, mejor será que cambies de velero antes de zarpar. No hay ningún riesgo en cambiar de borda, en el escondido me tendrás en cualquier puerto.

El futuro:

El que veo, el que escruto, el que anticipo: El futuro está escrito en las estrellas y su lengua no está al alcance de mis dedos. Seguiré lijando prolijamente y usaré, esta vez el Fairy en los oídos, a ver si logro entender su cantar de sortilegios.

De la guitarra hablaremos, y de la plaza del Rey, y de Madrid y de sus vistas, y de la mangosta, y sobre todo de lo más importante…..de tu hermana, de las dos niñas, del bebé, de la chica ecuatoriana y de la bulldog llena de grapas.

Para empezar, recógete la falda para mejor subir a bordo -si así lo has decidido-. En cuando lo hagas; izo bandera, despliego el foque, desenfundo la mayor y zarpamos rumbo al futuro…... Tiempo habrá de colocar baúles, neceseres y otros bártulos, en la primera calma chicha que crucemos.

¡Pues ahí queda eso!